Es fácil decir:
aguanta,
no lo estropees,
piénsalo bien,
quizá son imaginaciones
sin base ni sentido.
También es fácil decir:
no aguanto más,
rompo la baraja,
qué claro está todo.
Es lo mismo.
Es la misma actitud.
Es cuestión de valor.
Sólo es cuestión de valor.