Toda dispersión implica movimiento y, por tanto, tendencia a la quietud.
sábado, 12 de septiembre de 2015
Todo aquello que me alcanza ...
Todo aquello que me alcanza,
me alcanza de lleno.
Como un incauto expuesto,
sin posible retorno,
cubro mi cara
y mi cara son dos manos
que nada piden
y nada dan.
No hay comentarios:
Publicar un comentario